Derrama económica genero 28 mdp en Tequisquiapan
El municipio de Tequisquiapan se vio beneficiado con una derrama económica superior a los 27 mdp con la feria del Toro Bravo
Durante el fin de semana largo, el pueblo mágico de Tequisquiapan registró una derrama económica que pudo superar los 28 millones de pesos ya que además de la ocupación hotelera estuvo al 100%, esto lo confirmó el presidente municipal Antonio Mejía Lira quien recordó la Feria del Toro Bravo concluirá el 21 de marzo y se anticipa que para el cierre haya más de 35 millones de pesos.
Destacó que gracias a los operativos interinstitucionales se obtuvo saldo blanco en materia de seguridad; de manera general -dijo- las familias disfrutaron de un ambiente en el que se promovieron actividades culturales, gastronómicos y artísticas.
A pesar de los buenos resultados, Antonio Mejía Lira, consideró que este primer evento les sirvió de experiencia para que, en futuros eventos haya más actividades recreativas para los visitantes.
“La derrama económica, en general, sin duda va a rebasar los 35 millones de pesos, estos días que vienen será importante la presencia de muchos visitantes, durante este fin de semana largo habremos llegado a los 28 millones de pesos. Tenemos que ser muy honestos porque hay muchas cosas que se pueden mejorar sobre todo la calidad del servicio por lo que debemos involucrar más a los hoteleros y restauranteros”.
Mencionó que, de manera general fue un evento en el que se destacó la convivencia familiar; al ser cuestionado sobre la venta de bebidas embriagantes, el alcalde aseguró que esta fue “moderada” y gracias a los operativos de seguridad pública no se registraron incidentes vinculados con la ingesta de alcohol.
“Es muy distinto a otro tipo de ferias en donde el alcohol era el primer detonante para que los jovencitos hicieran de las suyas; hoy no, fueron familias enteras a convivir de manera sana. Fue más un espacio de buena vibra en la que todos participaron”.
Detalló que el municipio no promovió competencia desleal, por permitir la venta de alcohol en algunas carpas en plaza de Santa Cecilia, cuando el municipio hizo el esfuerzo de “llenarles los hoteles”.