Tejido de mimbre, tradición que decae
Los productores de artesanías importan la materia prima desde Singapur, dependencias federales y estatales analizan alternativas para manter dicha tradición
Los artesanos de Tequisquiapan, que se dedican a tejer canastos de mimbre, enfrentan una añeja problemática porque el material base, para realizar su actividad económica, se importa desde Singapur y el costo que deben pagar es en dólares, por lo que si hay una variación en la moneda internacional también repercutirá en los gastos que realicen.
Ante dicho fenómeno algunos artesanos han cambiado su actividad económica para revender artesanías que compran en Jalisco o sustituyen el mimbre por la vara, que es un producto nacional.
“Tequisquiapan se dio a conocer a nivel internacional por el bordado de mimbre para la elaboración de canastos, pero a como está el precio del material, muchos están cambiando de actividad económica o sustituyen el mimbre por la vara. El terminado no es el mismo pero al menos permite que la tradición continúe”, explicó la artesana Rocío Nieto.
Alternativas
Algunas alternativas que se analizan con apoyo de la Casa Queretana del Artesano, está el ofrecer a los productores de canastos materiales que no sean tan costos. Liliana Romero Medina directora general de FONART en México explicó que una opción es emplear el Mutusay, que es un tipo de varilla fina que crece en la selva de Tabasco y en la península de Yucatán.
“Lo que queremos hacer es el enlace entre los productores de Mutusay con los productores de artesanía de mimbre para que hagan la sustitución de la materia prima. Tanto la Casa Queretana de las Artesanías como el Instituto para las Artesanías en Tabasco ya han tenido varias reuniones”.
Explicó que a través de FONART se buscan alternativas diferenciadas acorde a las necesidades de cada región pues el objetivo es mantener las tradiciones que también son el sustento económico de las familias.
Al respecto del mismo tema fue cuestionado el Secretario de Desarrollo Sustentable, Marco del Prete Tercero, quien explicó que la problemática ya había sido identificada desde hace tiempo y una de las alternativas que se analizan es ayudar a los productores de canastos mediante la importación del mimbre, en grandes cantidades y sin intermediarios. La estrategia aminoraría el costo de los materiales.
“El cambio de material puede ser una opción, pero no es la mejor, el valor que tiene la artesanía es el producto de la materia prima en el que se está haciendo (…) A través del programa auténtica, buscamos volvernos grandes compradores de materia prima para aportarla a los artesanos porque muchas veces no pueden acceder a un precio de gran volumen”.