Sí habrá apoyos al campo, pero directo al campesino

El Delegado Estatal de Programas para el Desarrollo, Dr. Gilberto Herrera Ruiz, recibió en la Secretaría de Bienestar en Querétaro a integrantes y líderes de diversas organizaciones campesinas; entablaron un diálogo e intercambiaron puntos de vista en torno al fortalecimiento del campo mexicano y la entrega de apoyos al sector por parte del Gobierno Federal.

Al respecto, el Dr. Herrera Ruiz aseguró que en congruencia con la política nacional de no triangular, la asignación de los recursos económicos continuará realizándose de forma directa a los beneficiarios, en este caso a los campesinos; mientras tanto, las organizaciones pueden seguir trabajando para enfocarse en un aspecto primordial que es la comercialización de los productos.

“Ellos y nosotros tenemos el mismo interés: que el campo crezca, que sea un sector productivo y digno para la gente que vive ahí y que vive de ello. Se trata de organizaciones que plantean su reclamo en todo el país, es una demanda legítima y al escucharlos nos hemos comprometido a llevar su mensaje a la federación para encontrar puntos de acuerdo y explicar las razones de las diferencias que se puedan tener”, señaló el Delegado Estatal de Programas para el Desarrollo.

Indicó que aunado al mecanismo de entrega directa, el Gobierno Federal ya implementa la aplicación de precios de garantía a granos de suma importancia en el país, tales como el maíz, frijol, trigo y arroz; el apoyo con fertilizantes y asignación de créditos para la producción de leche, apícola, avícola, caprina y ovina.

“En buena medida el abandono a nuestro campo se dio porque se asumía que producir nuestros granos ya no era negocio y se optaba por traer todo del extranjero. Ahora la política está orientada a recuperar esos cultivos y fortalecer nuestra soberanía alimentaria. Por ejemplo, el precio del maíz estuvo oscilando entre 3 mil 800 y 4 mil 200 en el ciclo pasado, ahora está en más de 5 mil el precio de garantía”, detalló Herrera Ruiz.

El funcionario federal consideró que estas medidas son primordiales, pues más de 40 millones de mexicanos viven en el campo y se debe trabajar para esa población no se vea obligada a abandonar su tierra ni a migrar a Estados Unidos de América: “en la política del gobierno federal es prioridad atender las necesidades de los campesinos porque son quienes nos da de comer”.