Estudiantes que incendiaron a compañero de secundaria están suspendidos
El coordinador de la USEBEQ, Raúl Iturralde informó que los dos menores de edad que incendiaron a uno de sus compañeros en una telesecundaria están suspendiditos
El coordinador de la USEBEQ, Raúl Iturralde informó que los dos menores de edad que incendiaron a uno de sus compañeros en una telesecundaria están suspendiditos y a la espera de las investigaciones de la fiscalía; el menor está “delicado” de salud.
Por lo pronto, dijo, los menores están suspendidos, y se va a continuar colaborando con las autoridades correspondientes, por si se deriva alguna otra responsabilidad.
Explicó que los niños llenaron el lugar donde se iba a sentar con gel, que utiliza para lavarse y desinfectarse, y después que se impregnó totalmente, le acercan fuego y lo prenden.
Por los hechos la Fiscalía General del Estado (FGE) comunicó que la Policía de Investigación del Delito (PID) ya indaga sobre lo sucedido con el fin de deslindar responsabilidades y hacerle justicia a las víctimas.
De acuerdo con la FGE desde el 7 de junio iniciaron la carpeta de investigación, y es la Unidad Especializada en Justicia para Adolescentes el órgano encargado de la diligencia.
Respecto a la valoración de las lesiones del menor de 14 años de edad, los servicios periciales valoraron las lesiones provocadas en el adolescente, con el fin de darle continuidad al proceso penal hasta el total esclarecimiento de los hechos.
La Secretaría de Salud informó que el menor de edad está siendo atendido en el Hospital de Especialidades del Niño y la Mujer, que se ubica en la capital del estado.
El padre del menor de edad, Juan Zamorano, compartió que luego de que su hijo fuera trasladado por personal administrativo de la telesecundaria de El Salitre a una clínica de la comunidad, el menor de edad fue trasladado para atención especializada al nosocomio público.
Respecto al tratamiento médico, el padre expresó que su hijo ha sido intervenido quirúrgicamente en dos ocasiones para removerle la piel quemada y realizarle injertos de piel, sin embargo de acuerdo con los médicos aún se requerirán por lo menos dos intervenciones más.
En cuanto a su realidad para hacer frente a la situación que les tocó vivir, el padre de Juan expresó que se encuentran en una situación “complicada” pues desde los hechos, él y su esposa Eugenia tuvieron que dejar su trabajo -él en la construcción y ella como vendedora de dulces- para atender a su hijo y darle seguimiento legal a la agresión.
“Ahorita teníamos un poco de dinero, pero se nos está terminando. Necesitamos para los pasajes y para comer porque todavía tenemos niños chiquitos, mi esposa y yo ya no trabajamos porque nos estamos turnando para cuidar a nuestro paciente. Yo trabajo en la construcción y mi esposa vende dulces”.
En su oportunidad, la madre del menor, Eugenia, lamentó el actuar de las autoridades de educación pues –a su decir- buscaban ocultar la situación, ya que no se les avisó en el momento de los hechos; además de tomar la decisión de trasladarlo a una clínica en un vehículo particular, en lugar de hablar a la ambulancia y llevar al niño al hospital.